El Segundo libro de los Reyes continúa la historia de la desobediencia que comenzó en el Primer libro de los Reyes, alrededor del año 850 a. C. con la conclusión del ministerio profético de Elías en Israel y el inicio del trabajo de su sucesor, Eliseo. Israel se hundió en espiral en su infidelidad, finalmente fue derrotado y dispersado por los asirios en el año 722. Judá, el reino del sur, tuvo varios reyes que confiaron en Dios e intentaron realizar reformas. Pero después de muchos años de las advertencias de Dios a través de Isaías y otros profetas, los pecados de Judá fueron castigados con la conquista de Babilonia alrededor del año 605 y finalmente con la caída de Jerusalén en el año 586. El pueblo fue exiliado a Babilonia durante setenta años, tal como lo profetizó Jeremías. Dios se mantuvo fiel a su pacto a pesar de la infidelidad de Su pueblo. El autor de 2 Reyes es desconocido.